Shadow Warrior puede ser un nombre que pasa desapercibido para la mayoría de las personas. Si tú has sido un adolescente en los años 1990, seguro que te acordarás del shooter hecho con el mismo estilo de Duke Nukem 3D. Pues es el mismo título que Flying Wild Hog intenta revivir ahora.

Además de la famosa Katana, no podrían faltar las armas más tradicionales, como pistolas, ametralladoras y bestias. Cada una de ellas también tiene un sistema de mejoras obtenidas por medio de monedas dispersas en las fases.

Por supuesto que Shadow Warrior no se limita a traer la sangre, las espadas y los  monstruos. También tiene sus momentos para sólo disfrutar, como uno de los enemigos que estaba viendo TV mientras entramos en una habitación y otro que aprovechaba un jacuzzi. Esto también está presente en el diálogo de Lo Wang con el demonio que lo persigue en su búsqueda por una espada sagrada, llamándolo de “nerd”.

Crear un juego que va a atraer tanto los nuevos fans como los antiguos aficionados no es una tarea fácil. Shadow Warrior parece tener un poco de todo para agradar a todas las audiencias.